KEVIN MITNICK PODRÍA DECLARARSE CULPABLE Y SER LIBERADO
 

Mercè Molist
Pocas semanas antes de que empiece el juicio contra el mítico hacker estadounidense Kevin Mitnick, el 20 de abril, se ha filtrado la existencia de un posible acuerdo para que éste no tenga lugar. Según destapó la semana pasada ZdNet, citando fuentes de la fiscalía de los Estados Unidos, Mitnick estaría dispuesto a declararse culpable. A cambio, se rebajarían los cargos y saldría de la cárcel en pocos meses, con la prohibición de utilizar ordenadores durante tres años y de sacar provecho de su ya legendaria historia. Según su abogado, Mitnick cedirá sólo si se aceptan todas sus condiciones, que no han trascendido.

Kevin Mitnick, 35 años y apodado Condor, fue detenido y encarcelado en 1995, después de una obsesiva persecución por parte de Tsutomu Shimomura y con la mediación de un hacker informante del FBI. Se le acusaba de entrar en sistemas informáticos para copiar el código fuente de programas valorados en más de 80 millones de dólares, según las víctimas -Motorola, Fujitsu, Nokia, Sun, Novell y NEC-, de acceso no autorizado a un ordenador federal, interceptación de comunicaciones electrónicas y otros. Desde entonces, está en la prisión de Los Ángeles, a la espera de un juicio retrasado más de una vez y sin fianza, oficialmente por tener antecedentes al haber sido declarado culpable de delitos informáticos en 1989 y 1996.

En estos cuatro años, ha cambiado tres veces de abogado pero siempre ha mantenido su inocencia. Sus simpatizantes han acusado repetidamente al gobierno de vulnerar sus derechos constitucionales, al no darle la libertad bajo fianza, obstaculizar el trabajo de los abogados, tratarle más duramente que al crimen organizado o los asesinos raciales y convertirle en cabeza de turco y símbolo de la mano dura contra el hacking.

Las reacciones al posible desenlace no se han hecho esperar. En el Sitio Oficial de Kevin Mitnick puede leerse: "Que el gobierno acepte reducir el 75% de los cargos es una clara evidencia de que este caso ha sido dramáticamente exagerado". Emmanuel Goldstein, editor de la revista "2600", cuartel general de la campaña "Free Kevin", aseguraba a la revista "Wired": "Pase lo que pase, el caso Mitnick gravitará sobre cualquiera que sea juzgado por ofensas relacionadas con ordenadores. Cuatro años, sin fianza, sin juicio. Éstas son las palabras que debemos recordar. Hoy es un día triste para los hackers". La misma sensación sobrevuela los foros norteamericanos, como Slashdot, donde alguien escribía, al saberse la noticia: "Sea Mitnick un cracker, un lamer, un script-kiddie o alguien que haya hecho cosas estúpidas, lo que de verdad debería preocuparnos es que le metieron en una gran máquina informático-analfabeta donde ha estado, sin juicio, cuatro años. Sólo este hecho debería ponernos nerviosos".
 

Sitio Oficial de Kevin Mitnick
http://www.kevinmitnick.com
 

LIBERAD A KEVIN

Mitnick no podrá aprovecharse económicamente de su historia, pero ya hay otros que lo han hecho por él. Como John Markoff, el periodista del "New York Times" que le hizo famoso con el libro "Ciberpunks: forajidos y hackers en la frontera digital" y narró después su detención en "Takedown", del que Miramax prepara una película contra la que se ha hecho incluso una manifestación. Los defensores de Mitnick, convertido en estandarte de la lucha contra la demonización del hacker, han hecho decenas de páginas sobre él, dos "newsgroups", una lista de correo, un "RC5 Crack Team for Kevin Mitnick" y, lo más vistoso, han penetrado muchos sitios en la web para pedir su libertad, como el New York Times, Yahoo! o, recientemente, monicalewinsky.com, aunque Mitnick siempre ha rechazado esta forma de propaganda.

Pero la comunidad no está férreamente unida en este caso, especialmente en Europa: algunos son escépticos ante la espectacularización del caso, dicen cínicamente que Mitnick sólo es un personaje de póster para los chiquillos y les preocupa que pueda ser la referencia de lo que es un hacker. No olvidan que hay otros en la cárcel, sin tanta publicidad, y que la reciente muerte en extrañísimas circunstancias de Tron, un hacker alemán, no ha merecido el 1% de la atención que se ha dado a Mitnick.